Debe su nombre a
su proximidad a la Huerta de Alicante, que
junto con el Puerto, fue uno de los dos motores económicos de la comarca (Huerta en mayúsculas, asimilable a extensión
compuesta de huertos y con sistema de regadío) establece una separación
entre la playa de San
Juan y la bahía de
Alicante. A su vez, la bahía de Alicante se encuentra
delimitada por este cabo al norte y por el cabo de Santa Pola al
sur.
En el extremo más oriental del cabo de la Huerta se sitúa un faro de señalización para facilitar la navegación. En el cabo de las huertas podemos encontrar el parque de los jipis, la petanca, el tridente, el bonduel, el ambulatorio, la almadraba, las mansiones, la calita de Damián, el potao, los murales, la canasta, el club social de la urbanización Siena, la torre de Venecia III, el parquecito del venecia y muchos otros emplazamientos de cierto nivel cultural.
El cabo de la Huerta presenta en sus caras meridional y occidental multitud de calas y calitas rocosas, algunas de ellas de difícil acceso, y con frecuencia de carácter nudista.
Bueno, el caso es que el domingo 25 de Septiembre, quedé con mis amigos Pepe Alcaide y Miguel Perdiguero, para fotografiar la puesta de sol desde allí. Tuvimos suerte porque nos
acompañaron una nubes espectaculares y que unido a una temperatura muy agradable, nos proporcionaron los mejores aliados para poder fotografiar a gusto.
Sigo opinando que el cabo, es una de los lugares más fantásticos
que se puede encontrar para hacer muchas y buenas fotos. Hay tanta
variedad de rocas, rincones y motivos diferentes, que puedes pasar horas y
horas haciendo tomas y siempre parecerán distintas.
Si estais por la zona y os gusta la fotografía,
no dejéis de visitarlo.
Merece la pena.
Todas las fotos las podéis ver en grande pulsando sobre ellas.
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